Esta casa está situada en la misma calle del Palacete de los Visconde de Carrera, precisamente pared con pared, ocupando uno de los lados de una calle entera. Siguiendo la línea de arquitectura de las casas de la época, dispuesta de forma rectangular, esta fue edificada en la segunda mitad del siglo XVI, extensivo al inicio del siglo XVII. Sin embargo en esta casa, en 1875, fueron realizadas obras por un Señor comerciante que compró la casa a la Familia Alpuim, adaptándola a sus necesidades y transformando el piso superior para residencia y el inferior para el comercio.
De planta rectangular, está formada por dos pisos, siendo el piso inferior constituido por puertas de verga recta y el piso superior formado por ventanas de marco mainelada, encalladas por frontones contracurvados de gusto barroco. La fachada es rematada por un conjunto de merlones, siendo del lado izquierdo erigida una torre también coronada por merlones, con gárgolas de cañón. Los marcos de las ventanas y puertas de esta casa corresponden a un lenguaje manuelino, semejante al que sucede a la Casa de la Carrera.
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